Escalerita

Ya comienza Brasil-Croacia,
previo al mundial,
lindo partido.
Antes tengo que escribir
no se bien qué.

Pasa que es domingo tirando al mediodía
y hace frio. Tengo puesta la campera verde
y estoy con capucha, he tomado café y suena
Future Islands. Todo eso me genera una presión
en la parte alta de la espalda que se va escribiendo.

Por ahí, mi abuela con sus apariciones inentendibles
rompe el climax. Nada que no se pueda recuperar.

Voy produciendo una cantidad interesante de poemas.Me hace sentir eso, que soy como un cinco bien plantado
en la mitad de la cancha que entiende el juego y puede meter
pases gol, y que puedo ir a cortar pelotas determinantes para el
juego. En fin, una especie de Mascherano de la poesía dominguera.
 

Soberbia.

La parte importante
a la que quiero llegar
es esta, creo.

Las rodillas se mueven al ritmo de la música
no entiendo si está sucia la pantalla
si están sucios mis lentes.

Voy entendiendo que llegar aquí me cuesta.
No puedo dejar de escribir cuestiones de muy poca
importancia, para no enfrentarme a los renglones serios.

Me gustan las escaleritas que voy formando.

Sé que te gusta, no me lo puedes negar.
No voy a decir tu nombre, pero sabes que sos vos
no te conozco tanto pero sé que te gusta, como también
te gusta que rompa la cuarta pared de este poema para poder
hablarte. La primera vez he dejado de ver un partido de River por estar
con vos, eso no lo sabes, igual es un detalle. Me voy a ver Brasil-Croacia
mientas hago bici fija y pienso si como empanadas o milanesas con papas fritas.

Besito. 

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