Charlamos con mi amiga,
en vez de hacer
lo que tenemos que hacer,
como siempre.
El tópico en discusión:
"basta de curar el alma"
poesía, música, películas,
amigues, porros,
todo eso, junto o separado.
Falsas esperanzas de un mundo
que no invita a ser parte,
o si lo hace es más por el
espanto de no morir,
que por la dicha de la vida.
Dicen que Rimbaud era
un gran poeta. "El uno",
afirma un chango en una mesa
de un bar llena de hombres con
bigotitos. Se fuma un cigarro
mientras la chica que lo acompaña
lo mira como embotada en el humo
perdida en esa neblina de la nada misma.
Que fácil es ser parte de esa mierda.
Tengo un libro chico de Rimbaud,
dice Arthur, con letra chica y negra,
dice Rimbaud dividido en sílabas
blanco y grande,fondo naranja
envuelve las palabras.
No lo he leído,
nos tenemos que concentrar
en eso que tenemos que hacer.
Mi amiga suelta el cuaderno
va al baño
deja su celular abierto,
miro.
Chat de grupo de sus amigas
"Vamos de culiandanga"
es la propuesta de alguien.
Muchos emojis de manitos
que aceptan la propuesta.
"Mañana no nos juntamos
a seguir haciendo esta mierda
¿queno?" pregunto,
"No", es la respuesta.
Me pierdo en la charla
no presto atención
solo imagino que
va a ser interesante la noche
o leyendo Rimbaud
o yendo de culiandanga.
Mañana,
lo mismo,
salvo que juega la selección,
paréntesis del sinsentido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario